ANTICIPAR INNOVAR DECIDIR

Sin duda vivimos en un mundo de imágenes que nos impactan desde el principio de los tiempos y que hemos tratado de preservar de diversas maneras, sea ya como petroglifos, pinturas, esculturas, grabados, daguerrotipos, fotografías o cualquier otro sistema que nos permitiese guardar un testimonio de algo que consideramos efímero o que pudiese transformarse en algo diferente con el paso del tiempo. Hoy, la tecnología nos permite, a través de dispositivos al alcance de todos, retener imágenes de acontecimientos sociales, personales, sucesos e información de manera inmediata, mantenerlos en el tiempo y aun más, poder manipularlos usando programas específicos para ello.

La famosa frase “una imagen vale más que mil palabras” siempre ha tenido sentido pues es el modo en que los individuos fijamos fácilmente en nuestra mente un hecho cierto o no. ¿Nos hemos preguntado alguna vez como nació el fijar imágenes, en especial la fotográfica? ¿Cuál fue su origen, quienes se anticiparon liderando la innovación, que decisiones tomaron y que les sucedió? Recorramos juntos un poco de historia.

La palabra fotografía proviene de la unión de dos vocablos griegos, “phos”, luz y “graphos”, escrito o grabado, de los que se infiere una grabación o escrito hecho con luz. Si bien lo que hoy conocemos como fotografía en si tuvo un gran desarrollo en el siglo XIX, ya Aristóteles (385-323 a.C) y más adelante Alhazen (965 a.C-1040) capturaban imágenes mediante el principio de la cámara oscura, que es un espacio cerrado, totalmente oscuro en el que penetra la luz por una abertura en uno de sus lados, proyectando una imagen invertida. Este principio es el mismo de las cámaras fotográficas que conocemos. Más adelante, Leonardo Da Vinci (1452-1519 ) y Giovanni Battista della Porta (1535-1615) continuaron experimentando con esta cámara oscura hasta que Johann Zahn ( 1631-1707) creo un aparato portátil de madera que era una cámara oscura aparatosa pero ligera, sin embargo había un gran problema, no tenía como fijar las imágenes.

Es recién en 1826 cuando Nicephore Niepce (1765-1833) obtiene la primera imagen fotográfica, “Vista desde una ventana en Le Gras” mediante una exposición de ocho horas a la luz del día fijada en una placa de peltre cubierta de betún, encerrada en una cámara oscura. Un año después en 1827 Niepce llega a un acuerdo con Louis Daguerre (1787-1851) quien agregó al mecanismo una placa de plata pulida que reducía de manera significativa el tiempo de exposición. Así nace el “daguerrotipo” que fue muy usado para retratos, siendo luego reemplazado por el “colodión”, un barniz inventado por Gustave Le Gray (1820-1884) en 1850 que se aplicaba húmedo a una placa de vidrio y no sólo disminuía el tiempo de exposición, sino que permitía sacar copias de la imagen obtenida.

Richard Leach Maddox (1816-1902) inventa en 1871 las “placas secas” al gelatino-bromuro, muy superior al colodión húmedo ya que se obtenían negativos en vidrio que luego se hacían positivos en papel, reduciendo a la vez  el tiempo de exposición a un cuarto de segundo. Un importante fabricante de placas secas era el establecimiento que tenían en Lyon los hermanos Lumiere, Auguste (1862-1954) y Louis (1864-1948).  George Eastman(1854-1932) en 1888 crea un carrete de película enrollable de papel de 100 exposiciones y es  Hannibal Goodwin (1822-1900) quien en 1887 inventa la “película-llama” de nitrato de celulosa, llamada así por lo inflamable que era. Esta película es la precursora de lo que luego sería el celuloide, usado en la industria fotográfica y cinematografica.

Como vemos, la innovación fue acelerando los tiempos de captura de imágenes aunque éstas eran en blanco y negro. Si bien James Clerk Maxwell (1831-1879) en 1861 obtuvo la primera fotografía color superponiendo tres fotos consecutivas con filtros de color rojo, azul y verde para luego proyectarlas también superpuestas, no había forma de fijarlos por lo que artistas con paciencia coloreaban las copias obtenidas con acuarelas, óleos y pigmentos. Es recién en 1903 cuando los hermanos Lumiere patentan la primera placa color con el nombre de Autochrome que tenía un soporte de vidrio y un sistema de puntos muy semejante al que luego utilizaría la televisión a color. Eastman-Kodak patenta en 1935 la película fotográfica en colores bajo el nombre de Kodachrome y un año después la empresa alemana Agfa hace lo mismo con la denominada Agfacolor.

Regresando unas décadas en el tiempo, George Eastman y Henry Strong (1838-1919) se unen en 1888 y, a partir de la Eastman Dry Plate Co y General Aristo, fundan Kodak. Si bien hay discrepancias con respecto al porqué del nombre, se dice que George y su madre lo eligieron por ser un nombre corto, fácil de pronunciar en cualquier idioma y que solo podía significar nada más que Kodak. Como dijimos, su gran éxito fue sustituir las placas de vidrio por el carrete de papel, así como también el lanzamiento de la cámara Kodak 100 Vista, que usaba carretes de 100 fotos circulares y una campaña de promoción usando una frase que sería emblema por décadas, “usted apriete el botón, nosotros haremos el resto”. Luego, el carrete de papel fue reemplazado por el celuloide En 1900 Kodak logra masificar la fotografía con su Kodak Brownie, una cámara simple y económica que es usada prácticamente por todas las clases sociales haciendo posible capturar y conservar las imágenes una vez reveladas por la empresa.

Ernest Leitz (1843-1920) empresario dedicado a la fabricación de ópticas para binoculares, microscopios y telescopios contaba en su empresa con Oskar Barnack (1879-1936) ingeniero y fotógrafo, quien fuese el constructor de la primera cámara de formato pequeño y fácil de llevar, adaptándola a la película de 35 milímetros que se usaba en cine. Esta innovación hizo historia en 1925 cuando fue presentada en una feria de tecnología en Alemania bajo la marca Leica, nombre que deriva de las dos primeras letras de Leitz y de camera. Fue un suceso por tamaño y peso. La razón de la cámara fueron las ópticas que Leitz fabricaba y su prestigio se mantuvo por décadas.

Del otro lado del mundo, nace en 1917 Nippon Kogaku Kogio mas adelante conocida como Nikon cuya marca tiene origen combinando las dos primeras palabras que significan “óptica japonesa” y de Ikon, refiriendo a las cámaras Zeiss Ikon, producidas por la empresa de Karl Zeiss (1816-1888) fabricante de instrumentos ópticos. Nikon se especializó en cámaras de alta precisión, creando la primera cámara digital usada por la NASA para su programa Space Shuttle  en 1991 en conjunto con Kodak; más tarde lanzo su propia versión Nikon D1SLR. En 2016 se pagaron en una subasta en Austria, 400.000 dólares por una de las 738 Nikon One producidas entre 1948/49. Los fotógrafos artísticos y deportivos consideran la marca como top de los equipos fotográficos hasta hoy.

Ante esta masificación de la fotografía a nivel mundial, los individuos no dejaban de sorprenderse y adecuarse a los cambios, no sólo con la aparición de nuevas cámaras, más sencillas y livianas sino también a la diversidad de ópticas y películas que al final del día era el negocio principal de Kodak, la cámara podía ser Leica, Nikon, Canon u otra marca, sin embargo, la película era Kodak y había que revelarla e imprimirla de modo de poder preservar las imágenes obtenidas. Es así, que para 1934 se establece Fuji Film Co en Tokio, el primer productor japonés de película fotográfica como resultado de un fallido intento de asociación con Kodak en ese país. El desarrollo fue tan expansivo que en pocos años y con una guerra de por medio, logró incursionar en la producción de cámaras fotográficas, película cinematográfica, cristales ópticos, lentes, equipos médicos, convirtiéndose en el más grande competidor de Kodak en el sector fotográfico librando batallas que beneficiaron la innovación y, producto de ella, los precios al consumidor.

Volviendo a Kodak, si bien en 1975 presentó su primera cámara digital, sus ejecutivos no imaginaban un mundo sin la película tradicional, que era la razón de su existencia por lo que luego de algún fallido intento con Apple en 1994 mantuvieron relegada esta área del negocio aferrándose a su área de confort. El hecho es que, en 2001 la venta de película fotográfica cayó y no analizaron cuál era la tendencia de un mercado que consideraban dominaban y que asumían se recuperaría pronto. Probaron alternativas a lo digital con equipos que por su precio y complejidad, fueron fracasos previsibles. Competidores como Nikon, Canon y Sony estaban enfocados en la nueva tecnología poniendo todo su esfuerzo en abaratar y masificar el uso de lo digital.

En 2007 Steve Jobs (1955-2011) crea el primer teléfono inteligente, el IPhone con una cámara incorporada de 2 megapíxeles, hoy de 12 megapíxeles, revolucionando la industria de los teléfonos móviles así como de la fotografía.  Este cambio impactó significativamente en Kodak, quien en 2012 se acogió al Capítulo 11 declarándose en bancarrota después de varios años de caída en ventas de su negocio de película para fotografía. Planteó una reorganización que llevo a cabo con éxito e intentó volver al mercado digital en 2015 lanzando un teléfono inteligente que si bien tenia avances no pudo mantenerse en el mercado. De los 12 mil millones de dólares en ventas de película fotográfica en 1990, se estima que sus ventas serán de 2 mil millones en 2020. El negocio de captura de imágenes había girado a más velocidad, ellos no supieron anticiparse.

Su principal competidor, Fuji Film, si se anticipó a lo que vendría y aceptando que tendrían que aprender de cero una tecnología que no manejaban y competir en un mercado cada vez más complejo y de grandes inversiones. movieron su negocio de imágenes hacia el área de salud, farmacia y cosmética. En esta última son especialistas en cremas anti-edad continuando con investigación y desarrollo tecnológico en las tres áreas mencionadas.

Los dispositivos inteligentes de uso sencillo están cada vez más extendidos, abarcando todas las edades haciendo posible preservar infinidad de imágenes que pueden ser manipuladas, mejoradas, compartidas en tiempo real sin proceso de revelado previo ni espacio físico a ocupar.

Se estima que en 2020 el mundo tendrá 5,9 billones de teléfonos inteligentes, cada uno de ellos es una cámara fotográfica que registra imágenes sin necesidad de película ni revelado posterior. Un dato curioso es que en la lista de los diez países con más unidades por cada 100 habitantes encabezan la lista Estonia, Bharein y Macao donde hay hasta 188 celulares por cada 100 habitantes.

Sin duda, lo aquí presentado nos habla de la importancia de la anticipación, la innovación y el desafío de tomar decisiones de calidad. Es decir, no sólo en el plano personal, también en el nivel profesional debemos estar preparados para anticiparnos a un mundo que como dijimos, gira a mayor velocidad, y para mantenernos en ese “tio vivo” o “calesita” tenemos que anticiparnos a lo que vendrá, promover la innovación y asumir el riesgo.

Los personajes mencionados en este blog, por la época o por su preparación, si bien no contaban con todas las herramientas que tenemos hoy, no solo veían mas allá sino también tenían audacia, asumían el riesgo sin más temor que el necesario y por encima de todo, eran individuos con decisión, dispuestos a no quedarse en su zona de confort.

Anticipar, innovar y decidir son herramientas del éxito. Pongámoslas en acción.

Antonio Delgado
Senior Consultant & Coach

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Fuente: “Historia de la fotografía” (video) Gárgolafilms, “Historia de fracasos y fracasados que cambiaron el mundo”, Demian Sterman, “Historia de la fotografía”,Revista de Artes,“History of Photography” en The Encyclopaedia Britannica “Historia de la fotografía” en Wikipedia